La palabra tricoma proviene del vocablo griego trichōma, que significa “cabello”. En botánica, se conocen los tricomas como apéndices que nacen en la epidermis de los órganos de alguna plantas, de muy diversa estructura y función; cuyas forma, tamaño y fenotipo son muy variables (pelos, escamas, papilas…. ). Muchas especies vegetales tienen tricomas, y los clasificamos en dos grandes grupos: glandulares y no glandulares.

Fotografía macro de una flor de marihuana donde se aprecian perfectamente sus tricomas, todavía en desarrollo.

En la planta del cannabis, encontramos tricomas del tipo glandulares secretores. Estos se presentan en forma de unas diminutas glándulas de resina que, juntas, crean ese pegajoso, esponjoso manto blanco que envuelve y hace relucir las hermosas flores de la marihuana.

Tricomas y marihuana

En la planta del cannabis, encontramos tricomas del tipo glandulares secretores. Estos se presentan en forma de unas diminutas glándulas de resina que, juntas, crean ese pegajoso, esponjoso manto blanco que envuelve y hace relucir las hermosas flores de la marihuana. Los distintos tipos de tricomas tienen diferentes tamaños, los más pequeños pueden llegar a medir hasta 15 micrómetros. Para observar los tricomas de nuestras plantas de cannabis, necesitaremos la ayuda de una lupa o un microscopio. Con una lupa de joyero tendremos suficiente, y es ideal por su reducido tamaño.

Tipos de tricomas

La marihuana tiene tres tipos distintos de tricomas:

  • Tricomas capitados pedunculados: pueden ser unicelulares, o pluricelulares muy complejos. Se componen por un pie y una cabeza secretora, donde se sintetizan los cannabinoides, terpenos y flavonoides. Son los más abundantes y los de mayor tamaño (alrededor de 100 micrómetros), por lo que podremos observarlos a ojo desnudo. ¡Son los tricomas que nos ayudarán a elegir cuándo cosechar nuestras queridas flores!
  • Tricomas capitados sésiles: de menor tamaño (de 25 a 100 micrómetros) y menos abundantes que los capitados pedunculados. Tienen forma de seta, parecidos a los capitados-pedunculados, con cabezas redondeadas y un único tallo.
  • Tricomas bulbosos: estos son los tricomas más pequeños que encontramos en la planta de la marihuana (de 15 a 30 micrómetros), por lo que necesitarás una lupa para verlos. Si bien también poseen cabeza secretora, son los menos productivos.

Los tres tipos de tricomas se encargan de fabricar y almacenar los cannabinoides, terpenos y flavonoides que produce la planta del cannabis. Pero son los tricomas capitados pedunculados, los que más cantidad producen; debido, principalmente, a su superioridad en número y tamaño. Cannabinoides y terpenos son las moléculas responsables de los efectos medicinales y recreativos que causa el cannabis en nuestro organismo. Terpenos y flavonoides aportan, además, exquisitos aromas y sabores únicos a las distintas variedades de marihuana.

Fotografía de tricomas en una flor de Cannsbi sativa L. realizada con un microscopio

Los tres tipos de tricomas se encargan de fabricar y almacenar los cannabinoides, terpenos y flavonoides que produce la planta del cannabis. Pero son los tricomas capitados pedunculados, los que más cantidad producen; debido, principalmente, a su superioridad en número y tamaño.

 ¿Por qué son tan importantes los tricomas?

Los tricomas cumplen diversas funciones en el reino vegetal, también en las plantas de marihuana. Estas diminutas glándulas de resina actúan como defensa frente a hongos, plagas, insectos y animales depredadores. Asimismo, protegen a la planta de factores ambientales como fluctuaciones en la humedad y la temperatura, vientos fuertes, y los rayos ultravioleta.

Su otra función básica en el cannabis, la más conocida y apreciada por los amantes de esta planta, es la producción de cannabinoides, terpenos y flavonoides. Estas moléculas se forman dentro de la cabeza de los tricomas, gracias a la acción de vacuolas y plastidios: unos pequeños órganos los cuales producen determinados compuestos químicos, que se mezclan y reaccionan en contacto con los rayos UV-B, dando lugar a la síntesis de cannabinoides, terpenos y flavonoides.

Los tricomas nos indican el mejor momento para cosechar

A medida que maduran, los tricomas capitados-pedunculados cambian de color y aumentan su tamaño. Cuando nacen, son transparentes pero, con el tiempo, se van tiñendo de un color blanco-lechoso opaco. En ese momento, esos tricomas habrán alcanzado su clímax y se habrán hinchado, indicando que están cargados con el máximo contenido en terpenos y cannabinoides. En la siguiente y última fase de su vida, los tricomas se degradan y adquieren un color ámbar. Los cannabinoides y terpenos se oxidan, perdiendo calidad y cambiando su composición. Un buen momento para cosechar es cuando el 60-70% de tricomas son blancos y el resto, ámbar. Para saber más sobre la cosecha de tu cultivo de cannabis, puedes leer el siguiente artículo de nuestro blog: “Cuándo y cómo cosechar tus plantas de cannabis”.

Tricomas de color transparente, todavía en fase de desarrollo.
Tricomas de color blanco-opaco, en su máximo punto de madurez.

 

Tricomas, la materia prima de extracciones y concentrados de cannabis

Para muchos aficionados a la marihuana, los tricomas son la valiosísima materia prima con la que elaborar exquisitas extracciones y concentrados de cannabis. Gracias a los métodos de extracción de resina conseguimos separar los tricomas del cannabis de la materia vegetal y concentrarlos, obteniendo así un producto mucho más potente, con altos porcentajes de THC. Existe un gran abanico de técnicas distintas para la elaboración de aceites y resinas de marihuana: desde técnicas mecánicas con hielo (Ice-o-Lator); hasta procesos más complejos, donde se emplean gases como solvente (BHO). Y también extracciones que se obtienen simplemente con la aplicación de calor y presión (Rosin). Pincha en el título si quieres saber más sobre el apasionante mundo de las Extracciones de cannabis”.

¿Cómo aumentar la cantidad de tricomas en tus plantas de marihuana?

Genética y luz: dos factores clave

Las plantas de marihuana empiezan a producir tricomas con sus primeras flores. La cantidad de resina que produzca una planta de cannabis dependerá de la genética, así como de los cuidados que reciba durante el cultivo y el post cultivo: manicurado, secado y curado.

Como hemos visto, la luz ultravioleta participa directamente en el proceso de síntesis de cannabinoides, terpenos y flavonoides. En el cultivo de cannabis, la intensidad y espectro de la luz que reciben las plantas son dos factores esenciales, que determinarán la cantidad y calidad de sus tricomas. Un espectro de luz amplio hará fabriquen más tricomas. Por esta razón, si lo tuyo es el cultivo de marihuana en interior, es muy importante conocer y elegir bien el tipo de iluminación para tu cultivo.

Iluminación LED y LEC

Los sistemas de iluminación LED y LEC son la última innovación en cannabicultura y la mejor elección, ya que ofrecen un espectro de luz incomparable al de otros tipos de bombillas. Dos de nuestras recomendaciones para tu cultivo de cannabis indoor son el Panel BioLED y la Luminaria LEC LUMii SOLAR. Si quieres saber más sobre iluminación LED y LEC, lee el siguiente artículo acerca de “Espectro de color en la iluminación LED”, y este otro que trata de “Iluminación LEC.

 En el cultivo de cannabis, la intensidad y espectro de la luz que reciban las plantas son dos factores esenciales, que determinarán la cantidad y calidad de sus tricomas. Un espectro de luz amplio hará fabriquen más tricomas. […] Los sistemas de iluminación LED y LEC son la última innovación en cannabicultura y la mejor elección, ya que ofrecen un espectro de luz incomparable al de otros tipos de bombillas.

 

 
Luminaria LEC LUMii SOLAR

Panel BioLED

Los cultivadores de exterior, en cambio, pueden estar tranquilos y seguros de que sus plantas reciben la mejor luz: la luz del sol, el más amplio espectro luminoso que existe en nuestro planeta.

A tus flores les gusta ser tratadas con delicadeza

Los tricomas se pierden con facilidad, cuando manipulamos nuestras flores demasiado y/o con movimientos bruscos y golpes, ya que estas diminutas moléculas son extremadamente volátiles. Para conservar el máximo contenido en tricomas de tu cultivo de cannabis, deberás tener el máximo cuidado y cariño durante todo el proceso de post cultivo: manicurado, secado y curado. Si necesitas algún consejo, en este artículo te revelamos las mejores técnicas y trucos para llevar a cabo un óptimo «Manicurado de tus cogollos de cannabis«.

Los tricomas se pierden con facilidad, cuando manipulamos nuestras flores demasiado y/o con movimientos bruscos y golpes, ya que estas diminutas moléculas son extremadamente volátiles. Para conservar el máximo contenido en tricomas de tu cultivo de cannabis, deberás tener el máximo cuidado y cariño durante todo el proceso de post cultivo: manicurado, secado y curado.

Por otro lado, los tricomas se degradan por la acción de los siguientes factores ambientales: oxígeno, luz, calor y tiempo. La exposición de tus flores a tales elementos puede mermar seriamente la calidad y cantidad de sus tricomas, por lo que secar, curar y conservar adecuadamente tus cogollos de cannabis es clave, si lo que deseas son unas flores cargadas de tricomas. En nuestro blog, te contamos “Cómo secar y curar bien tu cosecha de marihuana”, y todo lo que eso te puede aportar.

Como hemos visto, el calor afecta los tricomas de nuestros cogollos de marihuana. Por eso, si cultivas en interior, es importante llevar un control preciso de la temperatura de tu sala de cultivo en todo momento. Asimismo, te recomendamos mantener la temperatura lo más baja posible (dentro del margen tolerado por las plantas) durante los últimos días de la fase de floración, y en el momento de cortar tus flores.

Más tricomas en tu cosecha de marihuana

Hasta el presente, no se conoce técnica o truco milagroso que ayude a las plantas de cannabis a producir más tricomas (el lavado de raíces con hielo es una leyenda popular, cuyos resultados no han sido comprobados todavía). Lo que sí podemos asegurar, es que unas plantas que crezcan sanas y en plenitud, tendrán los nutrientes y fuerza necesarios para producir el máximo contenido en resina, que su genética les permita.

Hemos visto que la genética, la luz y el momento de la cosecha juegan un rol determinante en la cantidad y calidad de los tricomas de nuestras flores de cannabis. Además de la luz, otros factores como son el oxígeno, el calor y el paso del tiempo contribuyen a la destrucción y degradación de estas diminutas glándulas de resina (generando cambios en su composición y efecto).

Por último, pero no menos importante, es esencial cuidar mucho cómo manipulamos nuestras delicadas flores, a lo largo de todo el proceso de cultivo y post cultivo: manicurado, secado y curado; pues los tricomas son extremadamente volátiles y se pierden con facilidad.

Como siempre, ¡trata a tus plantas con el máximo amor y cariño, y ellas te lo recompensarán! Si te ha gustado este artículo, ayúdanos con su difusión y ¡Compártelo en tus redes sociales!

¡Keep it high amig@s!

Fuentes

«Tricoma«. Wikipedia, La Enciclopedia libre:

«Botánica Morfológica. Morfología de Plantas Vasculares«. Facultad de Ciencias Agrarias. Universidad Nacional del Nordoeste, Corrientes, Argentina:

«Trichome«. Diccionario Merriam-Webster

«Trichomes» Have a Heart CC