El humificador nos permite controlar la humedad a niveles óptimos zonas secas o con exeso de calor. Los niveles de humedad relativa deben estar entre un 50% a un 80%, dependiendo de la fase vegetativa de la planta (esquejes, crecimiento o floración). Para su perfecto funcionamiento debe ser colocado en un recipiente con agua de menos de 5 cm de profundidad, se puede incorporar también un flotador (no incluido) para poder utilizarlo en piscinas o recipientes más profundos. El consumo del humidificador es inferior a 10W.

Los humidificadores necesitan un mantenimiento periódico y la utilización de agua destilada, de esta forma la cal no dañará el disco cerámico.